DESDE
QUE NACEMOS nos dicen lo que
tenemos que hacer, como nos tenemos que
comportar y hasta lo que es una vida digna.
Nos dejan claro cual es
nuestro lugar y cuales
son las obligaciones que debemos cumplir...
Inconscientemente nosotros lo aceptamos.
LO
ACEPTAMOS PORQUE NO QUEREMOS
SER EXCLUIDOS NI CONVERTIRNOS EN
LA
OVEJA NEGRA DEL CLAN, ASÍ DE
ESTE MODO CREEMOS QUE SEREMOS
ACEPTADOS
...
Estos
lazos o lealtades invisibles son
actitudes, creencias limitantes,
otras
tóxicas y
algunas muy
dañinas como
enfermedades
que nos llevan hacia
la muerte... y esto nos
parece hasta normal.
Escuchar
historias de la
familia
donde el
abuelo murió de cáncer por
ejemplo o
de
pulmón y eso
mismo le ocurrió
al padre y
después al hijo que comienzo con los mismos
síntomas...
lo
contamos con total naturalidad
contándolo una y otra vez, sin ni
siquiera
cuestionar si esto se pudo evitar. La
mayoría
lo integran en sus vidas como algo
normal.
Son
cárceles mentales que decidimos
inconscientemente quedarnos. Todas
esas
cárceles nos mantienen prisioneros, ajenos a
nuevas
oportunidades y a nuestro potencial.
El peso de estas creencias
que son como
grilletes
en el inconsciente es tremendo.
A
veces uno se siente prisionero de su propia
vida y se siente como
una víctima pero...
manteniéndose
en esta
actitud de victivismo
jamás se puede
reinstaurar el poder esencial, donde todo es
posible
para liberarse
de esos grilletes y salir
de esas cárceles mentales se
ha
de
comprender porqué
y para qué ha
sucedido
todo esto...
Para
romper esos grilletes o lealtades
invisibles has de transformar las
creencias
que la sustenta esto tiene consecuencias.
Aceptar que
nuestras creencias ni son
realidad ni son la única opción es
difícil de
digerir... sobre todo cuando estas creencias
instaladas
desde que nacemos están
asociadas a lealtades invisibles o
lazos de
sangre.
Aún
así si, decides hacerlo ... no te olvides de
la intención
que inició todo, que
es :
la
de priorizar la lealtad a ti misma y la
disposición a vivir feliz,
aunque nadie antes
de ti, lo haga conseguido.
Date
la oportunidad de deshacerte de lo que
no es tuyo para poder ser
quien has venido a
ser y expresarte desde tu honestidad libre de
miedos, creencias y deseos.
Nuestra
falsa identidad disfrazada de
distintos personaje según la
circunstancia del
momento le cuesta mucho renunciar a todas
esas
creencias porque su vida está basada en
ello, y en ese
ovillo
marañado
está las
lealtades de sangre, que nos sirve para
mantener la
pertenencia en
nuestra familia o
así lo creemos… nos
garantiza la cercanía y
más afinidad con
algunos de
los progenitores
aunque al hacerlo nos alejemos de la lealtad a
nosotros mismos, y
nos olvidamos
que a
quien debemos autentica lealtad es a nuestra
alma.
A
esa
alma, la llamo cariñosamente:
LA MOTA.
CUANDO
comiences
a entender… se humilde
y no trates de cambiar a los demás…
ocúpate de tu parte desde el amor.
Los
demás se liberarán de los grilletes
cuando ellos así lo elijan.